miércoles, 17 de junio de 2009

¡¡¡¡Llegóoo!!!!

Pues sí, por fin llegó, después de haberlo encargado en 29 de marzo, y ya sin esperanzas de que consiguieran el libro... llegó "Lorenzo Quinn" el libro de sus esculturas.¡¡Y además es edición biligüe inglés-castellano!!!! =D No tenía muy claro lo del idioma porque lo pedí en una galería de arte del Reino Unido (no lo encontré ninguna librería en España o_O )

Me encanta la sensibilidad que demuestra Lorenzo Quinn en sus esculturas y la precisión de su mensaje.

A falta de sus esculturas tengo un cuidado libro con sus fotos, explicaciones del autor respecto a qué significa para él esa obra, qué le inspiró, etc. La edición es muy bonita, con distintos tipos de letra, y con páginas impresas en papel vegetal para que puedas ver la obra "desde otro punto de vista" =P.

La única pega es que no tiene fotos de "Primer Amor" la escultura por la que le conocí

Más información de las esculturas de Lorenzo Quinn en
http://www.lorenzoquinn.com/
http://www.lorenzoquinnlleida.es/

2 comentarios:

Ricardo Guadalupe dijo...

Tiene mucho mérito esculpir manos como lo hace él, siendo como es una parte del cuerpo de especial dificultad para esculpir, también por lo expresivas que son, pero sin duda tiene un amplio dominio sobre el lenguaje de las manos, y así puede lograr transmitir con esas esculturas.

He echado un ojo a sus esculturas a través de los links que has escrito en el post y me quedo con la llamada "Apoyándose", tal como cuenta él yo también me quedé atónito al ver hacer esa figura a dos acróbatas del Circo del Sol.

En cuanto a mi escultor favorito, es Ron Mueck, aunque es un estilo muy diferente, es hiperrealista.

Un beso

Anónimo dijo...

Me llama poderosamente la atención el silencio de su página, sólo el sonido de unas pequeñas patitas, como si el ratón se hubiera convertido en pájaro. La escultura de la mano de Dios me ha recordado un texto, el que un hombre se quejaba de Dios, porque no le daba lo que quería; al salir a la puerta de su casa, en una ventisca, recoge un gorrión pequeño, asustado y lo envuelve en su mano. Él le habla cariñosamente al gorrión, asegurándole que su mano no le hará daño y que no tiene que temer de él, sin darse cuenta de que él era el mismo gorrión que se asustaba de la mano que Dios le tendía. Conexiones ;)